sábado, mayo 14, 2011

ACTITUDES VITALES

EXTRAVERSIÓN  -  INTROVERSIÓN
Jung distingue estos dos modos fundamentales, que condicionan la totalidad de los procesos psíquicos, es decir que conforman el hábito reactivo que determina el modo de actuar. Jung lo llama Estación de Conversión Central, encargada por un lado de regular la conducta externa y por otro, impone su forma a la experiencia específica.

Extraversión: relación positiva con el objeto en donde prevalecen los factores objetivos.

Intraversión: relación negativa con el objeto en donde predominan los factores subjetivos, provocando una adaptación deficiente.
Ambos se comportan recíprocamente y en forma compensatoria; si la conciencia tiene tendencia a la extraversión, el inconsciente será introvertido y viceversa.
Se cumple el mismo mecanismo, pero en este caso los estímulos no llegan desde el exterior, sino del YO de sujeto, es decir son endopsíquicos. Hay que encontrar el estímulo ene l poder de evocación. Transferido a la esfera consciente y colocando ese recuerdo en condiciones necesarias, producirá la respuesta al estímulo.
Si en el introvertido aparece la actitud consciente contraria (la extrovertida), el sujeto se transforma en extravertido inferior inadaptado. El objeto exterior es inundado de proyecciones subjetivas, deseos, anhelos o imágenes no vívidas, cobrando significación mágica.
Tal estado se lo ve particularmente en relaciones amorosas y sentimientos de odio. Todo ser humano carga esta dualidad a lo largo de su vida, con predominancia alternativa.

No hay que confundir introversión con egocentrismo, ni extraversión con egofugo. Son más bien dos direcciones de la libido.
El extravertido puede sumergirse tanto en el mundo de los objetos, que pierde el camino de retorno hacia sí mismo. El introvertido tiene dificultades a causa de unilateralidad.
Constituiría un ideal, aquel individuo que dispusiese con facilidad de las cuatro funciones psíquicas primordiales: pensar, percibir, sentir e intuir; y de los modos correctos de relación.
El juego de las funciones no se desenvuelve tan solo en el individuo mismo, sino que desempeña un papel importante hasta en las relaciones sociales: necesidad de compensar la estructura funcional de cada uno.
La distribución simbólica de los diferentes mecanismos sobre las zonas gráficas sería:
  • Plano Superior y Medio -> Ambos constituyen lo consciente
  • Plano Inferior --> Constituye lo inconsciente

No hay que olvidar la observación del aspecto gráfico global y demás concomitantes.

Tipo extravertido
  • Con Presión
  • Sin presión

Extraversión con tendencia a la histeria à letras “P.D.” de tamaño exagerado que delata los sentimientos subestimativos plusvalorantes mórbidos.

Introversión:
  • Dirección pegada a la izquierda
  • Escritura estrecha
  • Vertical sinistrógira
  • Lenta
  • Trazos finales con mayor afluencia de tinta
  • Trazos inseguros: hampas de la “h” aplastadas
  • Puntuación baja
  • Subrayado lento y tembloroso
  • Sin espontaneidad
  • Letra “i” de tamaño desmesurado
Extractado de Kurt Honrot

viernes, mayo 13, 2011

GRAFOLOGÍA EMOCIONAL II (Cont.)


A.    La base pulsional o protopsiquis es la piedra fundamental, fuente de energía potencial, materia prima indiferenciada. 
B.  La zona conflictual es la región de las estructuras inconscientes. Aquí pulsiones y represiones luchan por la supremacía. 
C.  Es la zona de estructuras conscientes, la fuerza represiva del superyó, la razón y la voluntad en donde se originan pensamientos que culminan con la emisión de juicios. Este proceso se llama  PSICOGÉNESIS.
La mente racional (consciente) y la irracional (inconsciente) se relacionan entre sí de tal forma que si una invade a la otra, perturba su normal proceso evolutivo.

PSICOGÉNESIS REGRESIVA
Se produce cuando las pulsiones instintivas de los estratos inferiores, vencen la represión e invaden la zona superior, impidiendo su evolución realizadora.

PSICOGÉNESIS PROGRESIVA
Se produce cuando una estructura superior irrumpe en otra inferior y la obliga a organizarse alcanzando un nivel más elevado.
La psicogénesis progresiva desorganiza primero para organizar después. La psicogénesis regresiva es exclusivamente desorganizante. En relación con la escritura vemos que:

 
FUNDAMENTOS DE LA GRAFOGÉNESIS
Mientras la mano efectúa el movimiento de realización, tratando de lograr el modelo caligráfico, la psiquis influye y la obliga a realizar el movimiento proyectivo.
Esto es producto tanto de la psicogénesis progresiva como de la regresiva, que pueden alterar pudiendo alterar totalmente la grafía en uno o varios de sus aspectos fundamentales.


LA PRÁCTICA DE LA GRAFOLOGÍA EMOCIONAL
Se trabaja generalmente con tres escritos de la misma persona, tomados en diferentes momentos. Se analiza uno de ellos y los otros dos sirven para corroborar. Por ejemplo puede pedirse:

  1.      Una carta formal
  2.      Un texto con datos personales
  3.      Un texto a criterio del grafoanalista

Los tests que se utilizan como apoyo de estas técnicas son:

  • El test de frases incompletas de Zacks, compuesto por 60 frases que deben ser completadas por el sujeto con lo primero que le viene a la mente.
  • El test de Honroth, compuesto por 8 frases que deben ordenarse según el criterio del sujeto.
  • Puede pedirse también un escrito que evoque un suceso triste y otro sobre un suceso alegre, en diferentes momentos.
La GE trabaja sobre el micro gesto, captando los accidentes escriturales propiamente dichos. En la Grafología Científica, hasta ahora se consideraba la forma, ahora se trabajará además con el fondo, tratando de establecer cómo se hizo. Cualquier choque emotivo altera la modulación del gesto gráfico. Cada detención, duda o intervalo en el desenvolvimiento escritural normal constituye una interrupción o corte en la actividad nerviosa. Así queda expresada la represión de un deseo, un pensamiento que aflora a la conciencia, exteriorizando la duda, la inseguridad, la falta de confianza. Aparece entonces lo que en GE se llama lapsus calami[1].
Tomemos el término emoción[2], del latín movimiento o agitación. “Una emoción es un movimiento del alma o del ánimo, algo que nos sacude o nos ‘con-mueve’. La palabra aparece registrada en español desde el siglo XVII, cuando llegó del francés émouvoir, que denotaba ‘emocionarse’ o ‘conmoverse’, pero en realidad su uso no se generalizó hasta el siglo XIX, El verbo francés provenía del latín emovere —formado por ex (hacia fuera) y movere—, que significaba ‘remover’, ‘sacar de un lugar’, ‘retirar’, pero también ‘sacudir’, como suele hacer la emoción con nuestro ánimo”. (Marcelo Sallesses).
La emoción agita, moviliza nuestro interior provocando cambios en la conducta. Los estímulos que provocan nuestras emociones pueden ser internos o externos. Si el tono emotivo es normal, el ánimo es sereno. En cambio si transitamos por alguna tensión emotiva se producirán estados internos que actuarán sobre las funciones orgánicas excitando o deprimiendo. No se escribe de la misma forma el nombre de una persona amada que el de una persona odiada.

                                                                                                                                                                               MARÍA lATORRE
                                                                                                                                                                                 Grafoanalista


[1] Los lapsus cálami se producen por la superposición de dos ideas, la que habíamos elaborado que actúa casi inconscientemente y aquella que viene a ocupar el centro de la conciencia. Toda falla de esta índole indica la dificultad de adaptarse a las circunstancias del momento y puede representar en términos generales un anhelo, un deseo enfrentado a un temor, es decir un estado de ambivalencia aguda, (Honroth). Lapsus Cálami es el equivalente escrito del lapsus lingue del Dr. Freud.
[2] La misma raíz etimológica de la palabra emoción proviene del verbo latino movere (que significa moverse) más el prefijo “e-“, significando algo así como “movimiento hacia” y sugiriendo, de ese modo, que toda emoción hay implícita una tendencia a la acción. EXTRAIDO DEL LIBRO “INTELIGENCIA EMOCIONAL” PAGINAS 26-29, AUTOR DANIEL GOLEMAN, EDITORIAL KAIROS