viernes, mayo 21, 2010

ORIENTACIÓN VOCACIONAL I

El proceso de Orientación Vocacional se lleva a cabo en un tiempo pautado y limitado y se basa en una cantidad fijada de entrevistas, según el perfil del interesado. Para su desarrollo cuenta con determinadas herramientas teóricas, técnicas y prácticas mediante las que se obtiene un resultado en relación con la personalidad del evaluado, pudiendo aparecer además otras cuestiones que pueden estar presentes, pero ser desconocidas para el sujeto, y que tal vez puedan ser las que dificulten las elección de la profesión, por ejemplo.

El trabajo de orientación suele realizarse en personas jóvenes que están terminando el ciclo de sus estudios secundarios, y que consultan porque no tienen bien en claro que opción de carrera o trabajo elegir. Pero también puede hacerse con adultos que deciden comenzar un estudio o redefinir sus intereses profesionales.

En el caso de los adolescentes, es el fin del periodo escolar, durante el cual ha madurado y se ha desarrollado como ser social, construyendo su identidad, tratando de descubrir como es, cuáles son sus gustos preferencias y deseos, buscando el encuentro con pares y tratando de encontrar su sector de pertenencia y, muchas veces el establecimiento de una pareja.

Contrariamente a lo que muchos adultos creen es una etapa de gran confusión, en la que se pierden los modelos de la infancia y se enfrentan no sólo cambios físicos y metabólicos, sino también psicológicos importantes. Y es en este momento de desorden y cambios en el que el adolescente debe tomar una de las más significativas decisiones: su futuro profesional y/o laboral.

Es importante tener en cuenta además, durante el proceso, el contexto socio – económica de cada familia, para que esta decisión pueda llegar a buen fin. Existen también quienes se plantean la alternativa de trabajar o estudiar únicamente, sino ambos.

Llegamos aquí a lo que podríamos llamar la identidad ocupacional, que puede aparecer, tal vez por primera vez en una consulta por Orientación Vocacional. La misma está relacionada con la autopercepción, la imagen que la persona tiene de sí misma, y que se involucra con el futuro contexto laboral o profesional. Es un aspecto de la identidad.

El hecho de elegir se instala en el presente pero abarca un proyecto de vida y un futuro determinado. El decidir la carrera o profesión, supone no solo las materias que se van a cursar y lo interesantes que resulten, sino el campo laboral una vez recibido, el ámbito de trabajo, el prestigio que tenga la profesión elegida, el futuro económico, y todas aquellas preguntas e inseguridades que suelen aparecer el momento de una decisión que incluye determina el futuro. Es decir que vocación, carrera y modo de vida deben vincularse para que la experiencia universitaria y laboral proporcione bienestar personal, relacionando las aptitudes, aspectos y deseos de cada uno.

En función de lo dicho el proceso tiene como finalidad específica la orientación vocacional-ocupacional de la persona en concordancia con:

1. La personalidad del interesado

2. El autoconocimiento y percepción de si mismo que el orientado tenga: autoestima, autoconcepto, identidad, etc.

3. Componentes socio - ambientales y culturales de su círculo. Esto implica indagar en el entorno familiar, amistades. Nivel socio económico, escuelas a las que asistió o asiste, ocupación o profesión de los padres…etc.

4. Teniendo en cuenta los ítems anteriores, habrá que puntualizar ahora la solicitud del interesado: su preferencia por alguna carrera o profesión en especial, el conocimiento que tenga de la misma: materias, campo laboral, nivel de inserción, y la imagen real o idílica que la persona tenga de las características de la profesión elegida.

Como profesionales especializados en el tema, y contando con las innumerables posibilidades que brinda la Grafología, estamos ante el desafío de obtener resultados en un corto plazo, pero que tendrán repercusión en el futuro.

María Latorre
Grafoanalista

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